5 PUNTOS A TENER EN CUENTA SI ERES ARTISTA

1. PON VALOR A TU TRABAJO, TU TRABAJO ARTISTICO VALE.

Cómo artistas, creadores y creadoras de obras y contenido, trabajamos con nuestro tiempo, nuestra creatividad, nuestras habilidades conseguidas a base de práctica, constancia, dedicación y formación pagada de nuestros bolsillos.

Es lógico reaccionar ante la indignante situación en la que te ofrecen un trabajo no remunerado.

Es cierto que está en cada una el aceptar el trueque,(dependiendo de las condiciones es también una forma de pago) incluso, si tú lo deseas, no pasa nada por hacer cosas sabiendo que tal vez solo tendrás reconocimiento, siempre y cuando sea bajo tus propias condiciones.

Pero has de saber que de eso no se vive, y que, si quieres vivir de tu arte, no podrás tener una carrera sostenible y autosuficiente regalando tu trabajo.

El trabajo artístico es algo sumamente valioso, aunque no sea considerado de esta manera cuando se compara con otras profesiones. Este, es un reflejo del mundo que nos rodea, de quiénes somos, de la forma en cómo nos relacionamos, una forma de expresar lo que sentimos y una manera de trascender, transmitir y evolucionar con el paso de los años.

Como creadores y creadoras nos encontramos ante la poca valoración del trabajo visual y artístico, por lo que se trata de congruencia y valoración justa del trabajo por parte de organizadores/ empleadores, pero también de nosotras mismas y de la sociedad.

Nuestro trabajo, nuestro conocimiento y tiempo también valen.

2. EL PLAGIO

El plagio se da cuando una artista copia las ideas o el trabajo de otra artista, y trata de hacerlo pasar por suyo.

Esta es una cuestión social, y aunque el plagio no es algo nuevo, ya que, desde el siglo V a.C. ya se le ponía nombre, ahora es cuando más facilidades tenemos para encontrar obras y darles forma apropiándonos así de estas.

Dentro del plagio hay varias formas y tipos, y entre ellas, la más común, es la copia no autorizada de la propiedad intelectual de otra persona, aunque también se da el caso en el que, en vez de la obra, se copia la forma de trabajar de dicha persona.

También existe la falsa autoría, esta se da cuando una persona (la cual es nombrada como única autora de la obra) paga a otra para hacerle el trabajo.

Hoy en día muchas personas copian el trabajo de otras por varios motivos, ya sea para sacar provecho económico, publicitario, o incluso reputacional en una rama artística específica.

Como artistas debemos respetar el trabajo de las demás personas, y entender que, todas tenemos nuestro proceso de idea, creatividad, trabajo y obra.

Si queremos usar parte de algo aprendido de alguna artista, parte de una obra, incluso la forma de trabajar de otra persona, siendo esta quien te lo ha enseñado, siempre debemos citar al artista (además de preguntarle si puedes usar sus métodos o creaciones) para así hacer diferencia entre inspiración y plagio.

Muchas veces conectamos con el arte de otras personas, lo cual nos sirve de inspiración e incluso nos ayuda a investigar dentro de nuestro propio estilo y proceso, siempre y cuando tengamos en cuenta la diferencia anteriormente mencionada.

El arte es una manera de comunicación y entre artistas nos comunicamos, transmitimos mensajes, historias, ideales....

Pero no todas las personas recibimos el mismo mensaje de una obra, y ahí, es donde reside la belleza del arte.

A las personas dedicadas al arte nos gusta que compartan nuestro trabajo, siempre y cuando se nos dé el reconocimiento del mismo.

Importante: siempre que quieras compartir en una plataforma, cuenta o red exterior el trabajo de alguien, hay que citar al artista, (ya que muchas veces no se le consulta) al menos de esta manera le das el valor y reconocimiento que se merece.

Compartir el trabajo de otras personas es una buena forma de apoyo, ya sea en tus redes virtuales como con el boca a boca, incluso lo mejoras más aún si te tomas unos minutos para escribir o contar algo bonito del trabajo de esta persona.

A la hora de trabajar con alguien recuerda que no estás trabajando de manera individual, y todas las personas colaboradoras deben tener el mismo peso en la balanza tanto a nivel de responsabilidad como en voz y voto respecto al trabajo que se está realizando.

4.RESPETA TUS VALORES, PERO NO PONGAS TUS IDEAS POR ENCIMA DEL RESTO

Es muy importante respetarse a una misma, incluyendo nuestros valores e ideales, pero muchas cometemos el error de poner nuestras ideas y pensamientos por encima del resto.

Tener las ideas claras no quiere decir que nuestra perspectiva sea igual a la del resto o sea la que vale.

Dicho esto, a la hora de trabajar con ciertas personas, grupos u organizaciones debemos plantearnos si realmente nos merece la pena a nivel ético llevar a cabo estos trabajos, y aunque en esta profesión no solemos tener muchas opciones laborales y económicas, es importante saber con quién se está trabajando, para quién vas a realizar dicho trabajo, o incluso a quien vas a dar trabajo.

Cada persona tenemos nuestros valores y nuestras ideas de lo que se debe o no hacer, no siempre tenemos la razón, pero si a la hora de trabajar con alguien, ese alguien no entra dentro de nuestro criterio de ética y respeto hacia otras personas, culturas, estilos artísticos, etc... A lo mejor deberíamos plantearnos el no trabajar con esta persona, por amor al arte y a lo que hacemos con y de él.

Todo Artista tiene derecho a expresarse de acuerdo a sus habilidades y somos libres de ejercer nuestros derechos, pero la libertad de una persona termina cuando pisa la libertad de otras, y por mucho que nos resistamos, no podemos separar a la persona del artista o de su arte.

5.RESPETA TU PROCESO CREATIVO

Como ya hemos mencionado anteriormente, cada artista tiene su propio proceso creativo; Idea, creatividad, trabajo y obra, y por eso no debemos comparar nuestro camino con el de otras personas.